Las palabras cargadas de energía tienen el poder de crear o destruir relaciones y la capacidad de crear situaciones acorde a lo que dices. Tus palabras moldean una situación en un momento determinado.
Es importante que aprendamos a declarar palabras de fe y confianza en Dios, en lugar de permitir que palabras negativas y derrotistas dominen nuestra vida. Debemos creer que lo que decimos tiene el poder de manifestarse, siempre basados en la voluntad de Dios y en línea con Su Palabra.
Nuestras palabras tienen un gran poder y pueden tener un impacto significativo en las personas que nos rodean. Debemos ser conscientes de cómo las usamos y buscar formas de edificar y animar a los demás. Además, debemos ser sabios al hablar, escuchar antes de responder y controlar nuestras emociones.
Nuestra capacidad de comunicarnos a través de las palabras es un don que Dios nos ha dado. En la Biblia, se nos enseña que nuestras palabras tienen un poder increíble. Proverbios eighteen:21 nos dice: «La lengua tiene poder sobre la vida y la muerte; quienes la aman comerán de sus frutos».
Dicen que siempre hay una primera vez, si sientes curiosidad de saber lo que se siente pasar tres días sin comer hoy lo descubrirás.
Incluso las palabras que decimos a nosotros mismos pueden tener un efecto profundo en nuestra autoestima y en nuestra percepción de nosotros mismos.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre el poder de la Palabra.
“Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive permanece para siempre”
La Biblia nos advierte que un día daremos cuenta de cada palabra que hayamos hablado. Mateo twelve:36 nos dice: «Pero os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio».
Cuando aprendemos a hablar palabras de amor, aliento y compasión hacia los demás, estamos reflejando el amor de Dios en nosotros. Debemos recordar que nuestras palabras pueden tener un impacto duradero en la vida de las personas, por lo que debemos usarlas con cuidado y responsabilidad.
También se nos anima a utilizar nuestras palabras para bien en Efesios four:29, donde se nos dice que nuestras palabras deben ser «útiles para click here la edificación según la necesidad del momento, para que imparta gracia a los que oyen».
Las palabras son herramientas poderosas que pueden impactar tanto positiva como negativamente en nuestras vidas y en la de los demás. En la Biblia, encontramos numerosos pasajes que nos enseñan sobre el poder de nuestras palabras y cómo debemos usarlas con sabiduría y amor.
Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que United states of america bien la palabra de verdad.
Esto significa que nuestras palabras pueden ser una fuente de consuelo y alivio para aquellos que están pasando por momentos difíciles.